
Qué es el ciberriesgo y por qué tu empresa no puede ignorarlo
11 de diciembre de 2025El concepto de amenazas emergentes ya no es una etiqueta, es un hecho operacional: las organizaciones enfrentan vectores de ataque que operan en tiempo real, se adaptan mediante inteligencia artificial (IA), aprovechan identidades legítimas y explotan la convergencia entre entornos IT, OT e híbridos con altísima eficacia. Las métricas más recientes de proveedores, analistas y noticias especializadas muestran que estas amenazas ya están aquí, evolucionando y causando impacto económico, operativo y reputacional sin precedentes en la historia de la ciberseguridad corporativa.
Esta publicación explora en profundidad qué son estas amenazas, cómo funcionan, por qué son tan eficaces, qué ejemplos reales las ilustran, cuál es su impacto económico y cuáles serán sus tendencias predominantes en 2026.
1) El fin del perímetro clásico: la superficie de ataque real
Hace menos de una década, los CISOs todavía hablaban de proteger un perímetro de red físico. Hoy esa idea es completamente obsoleta. La superficie de ataque real está definida por:
- Identidades humanas y no humanas dispersas (usuarios remotos, API keys, cuentas de servicio, proveedores).
- Infraestructura híbrida multicloud (público/privado/edge).
- Dispositivos OT/IoT con conectividad extendida.
Con la adopción masiva de entornos híbridos y multicloud, los ataques ya no “entran por el perímetro”; residen dentro de la topología de confianza de las organizaciones. Esto significa que los atacantes se enfocan en:
- Robar, clonar o secuestrar identidades.
- Explotar configuraciones mal gestionadas de servicios cloud (IAM mal configuradas, cuentas con permisos excesivos).
- Utilizar mecanismos legítimos de acceso para moverse lateralmente.
En este modelo, no hay “dentro” ni “fuera”: hay confianza operativa distribuida, y las amenazas emergentes se aprovechan precisamente de esa confianza, no de una “brecha técnica” tradicional.
2) Identidad: el epicentro del riesgo moderno
Una de las principales conclusiones de los informes globales del último año es que las identidades comprometidas siguen siendo la vía de acceso principal de los ciberataques de alto impacto:
- Más del 61 % de todas las brechas documentadas involucran credenciales robadas o secuestradas.
- Ataques de phishing potenciado por IA han aumentado más de un 1 200 %.
- El uso de MFA tradicional sigue siendo insuficiente frente a ataques de bypass de MFA y secuestro de sesiones activas.
Las amenazas emergentes basadas en identidad incluyen:
- Phishing hiperrealista generado por IA, indistinguible de comunicaciones legítimas.
- Bypass de MFA mediante técnicas sofisticadas de ingeniería social.
- Abuso de tokens y sesiones válidas para moverse lateralmente sin disparar alertas.
Este enfoque de riesgo impulsa la adopción de arquitecturas Zero Trust Identity‑First, donde cada interacción se verifica y se registra de forma continua, reduciendo la superficie de ataque asociada a usuarios y servicios.
3) Inteligencia artificial ofensiva: la industrialización del ataque
Una de las amenazas emergentes más disruptivas es el uso de IA de propósito general y agentes autónomos (agentic AI) para automatizar ataques completos:
- Agentes de IA ya pueden ejecutar campañas de phishing, reconocimiento, explotación y exfiltración sin intervención humana significativa.
- La automatización ofensiva permite ejecutar ataques simultáneos a gran escala con muy poca supervisión humana.
- Modelos avanzados de IA pueden identificar y explotar vulnerabilidades en código o configuraciones sin escribir una sola línea de malware manualmente.
Los informes sugieren que esta IA ofensiva ha acelerado el ciclo de ataque dramáticamente; por ejemplo, algunos ataques que antes podían tardar semanas ahora se realizan en minutos con IA autónoma.
La consecuencia directa es que los equipos de defensa, si no usan IA defensiva complementaria, quedarán infraequipados para responder en tiempo real. Esta carrera entre IA ofensiva y defensiva es el corazón de las amenazas emergentes actuales.
4) Persistencia silenciosa: ataques que no suenan
La mayor parte del daño real no ocurre en un solo evento explosivo. Ocurre cuando:
- El atacante establece presencia silenciosa en sistemas críticos.
- Usa herramientas “legítimas” para moverse lateralmente sin activar alarmas.
- Implantan mecanismos de persistencia difíciles de detectar.
Este tipo de amenaza emergente se alimenta de dos factores:
- Abuso de confianza operativa (identidad, roles, permisos).
- Baja visibilidad de telemetría relevante (no se registran los eventos críticos).
La persistencia silenciosa es una de las razones por las que el “tiempo medio de detección” (MTTD) sigue siendo inaceptablemente alto en muchas organizaciones, incluso cuando implementan herramientas avanzadas de seguridad.
5) Ransomware y doble/triple extorsión: amenazas emergentes económicas
Aunque el ransomware no es nuevo, su evolución en la última etapa lo convierte en una amenaza emergente económica y estratégica:
- En 2025, aprox. el 43 % de las organizaciones fueron objetivo de ransomware.
- El modelo de doble extorsión (robo de datos + cifrado) ya está presente en casi el 87 % de los ataques.
- Plataformas de Ransomware-as-a-Service (RaaS) han democratizado el acceso a ataques sofisticados.
Además, se observa la evolución hacia “triple extorsión”, donde se añade la amenaza pública, la manipulación de reputación y la presión legal, lo que aumenta el impacto y dificulta la respuesta organizacional.
Los daños proyectados son enormes: las estimaciones de impacto global de ransomware y extorsión superan los cientos de miles de millones de dólares al año, y se espera que estas cifras sigan creciendo de forma exponencial hacia 2030.
6) OT & IoT: el riesgo físico y operativo ya es digital
Una de las amenazas emergentes más insidiosas surge de la convergencia entre IT y OT:
- Sistemas industriales y de fabricación conectados ahora comparten plataformas con sistemas empresariales.
- Botnets de dispositivos IoT siguen creciendo, expandiendo la superficie de ataque.
- El riesgo no es sólo digital: puede causar fallos físicos, interrupciones de producción o daños a infraestructura crítica.
En respuesta, las organizaciones líderes están adoptando arquitecturas de seguridad adaptadas para OT, incluyendo segmentación avanzada, digital twins para simulación de ataques y controles AI‑driven adaptativos para cerrar las brechas entre OT e IT.
7) Deepfakes e ingeniería social avanzada
Las técnicas de ingeniería social ya no son simples correos mal redactados: son sofisticadas, impulsadas por IA y extremadamente realistas:
- Los deepfakes de audio y vídeo han permitido fraudes de suplantación con transferencia de fondos de alto valor.
- Los ataques de “vishing” utilizando clonación de voz se han multiplicado más de cuatro veces en poco tiempo.
- Ataques en tiempo real basados en deepfakes pueden engañar sistemas de autenticación biométrica.
Estas amenazas emergentes atacan directamente la confianza humana (el eslabón más débil en cualquier cadena de seguridad) y requieren controles técnicos como validación multifactor resistente al spoofing, acompañados de formación organizacional avanzada.
8) Vulnerabilidades tradicionales: mantienen un gran volumen
Mientras que los vectores emergentes capturan titulares, las técnicas tradicionales siguen explotándose masivamente:
- Phishing sigue aumentando año tras año con campañas más dirigidas y confiables.
- Vulnerabilidades sin parchear en software, dispositivos o bibliotecas (supply chain) siguen siendo una puerta de entrada crítica.
- Configuraciones incorrectas en entornos cloud (IAM, almacenamiento expuesto) representan una proporción significativa de brechas.
Los atacantes combinan estas técnicas tradicionales con IA ofensiva para amplificarlas, creando amenazas más eficaces que nunca.
9) Cumplimiento y regulación: NIS2 y la era de la evidencia técnica
La normativa europea y global exige más que políticas: requiere evidencia técnica continua:
- Reporte de incidentes en plazos estrictos.
- Evaluaciones periódicas de riesgo con métricas medibles.
- Auditoría técnica de controles, no solo documentación.
Esto transforma la evaluación de riesgos de un ejercicio estático a un proceso continuo de monitoreo, análisis y mejora, alineado con marcos como NIS2, DORA y ENS.
10) Predicciones de amenazas emergentes hacia 2026
Basado en datos, tendencias observadas y evolución actual:
- IA ofensiva seguirá expandiendo el volumen y sofisticación de ataques.
- Identidad como vector dominante, con ataques basados en MFA bypass y secuestro de sesiones.
- Ransomware y extorsión múltiple se consolidarán como vectores económicos críticos.
- OT/IoT continuarán absorbendo ataques con impacto físico y operacional.
- Deepfakes y ataques sociales seguirán evolucionando hacia suplantaciones hiperrealistas.
La inteligencia artificial se convierte tanto en amenaza emergente como en herramienta defensiva imprescindible.
Conclusión: las amenazas emergentes ya operan y dominan el riesgo de 2026
La palabra emergente ya no indica algo futuro, sino algo activo, adaptable y en constante expansión. Las organizaciones exitosas en 2026 serán aquellas que:
- Apliquen Zero Trust Identity‑First como estándar.
- Integren IA defensiva con monitoreo continuo.
- Visualicen y gestionen la superficie de ataque en tiempo real.
- Demuestren cumplimiento técnico verificable con evidencia continua.
Cosmikal: entornos de trabajo blindados y seguridad multicapa frente a amenazas emergentes
Frente a un panorama donde las amenazas emergentes evolucionan continuamente, Cosmikal ofrece una defensa integral basada en entornos de trabajo blindados y seguridad multicapa, diseñada para proteger tanto entornos IT como OT. Su enfoque se basa en un principio fundamental: cada interacción con sistemas críticos debe pasar por un espacio de trabajo controlado, monitorizado y asegurado por diseño.
Entornos de trabajo blindados
Cosmikal implementa dos modalidades de entornos protegidos:
- RSW (Remote Secure Workspace): mediante Endurance, los usuarios interactúan con sistemas críticos desde un Espacio de Trabajo Remoto Blindado, combinando VDI, PAM y monitorización continua. Cada acción queda registrada, eliminando riesgos de movimientos laterales o exfiltración de datos, incluso si el endpoint del usuario está comprometido.
- LSW (Local Secure Workspace): con Ranger, los accesos se realizan desde thin clients gestionados centralmente, restaurados en cada inicio. Esto garantiza que solo dispositivos confiables puedan interactuar con activos críticos, reduciendo exposición a malware, phishing o configuraciones inseguras.
Seguridad multicapa
La protección de Cosmikal se articula en varias capas que se refuerzan entre sí:
- Control de accesos y credenciales mediante PAM y vault encriptado, asegurando que las identidades privilegiadas nunca sean un vector de ataque.
- Broker de Conexión que limita la comunicación entre usuario y activo a eventos esenciales (teclado, ratón, vídeo, audio), impidiendo exfiltración de datos o manipulación de sistemas.
- Monitorización continua y auditoría automática, ofreciendo evidencia verificable para facilitar el cumplimiento de normativas como NIS2, ENS o ISO.
- Integración híbrida IT/OT y multicloud, protegiendo activos críticos independientemente de su ubicación o naturaleza, y cerrando brechas entre entornos tradicionales y conectados.
Este enfoque combina entornos de trabajo blindados con seguridad multicapa, asegurando que las organizaciones puedan detectar, contener y mitigar amenazas emergentes en tiempo real, transformando la complejidad de los ataques modernos en control operativo y ciberresiliencia.
En resumen, mientras las amenazas emergentes redefinen la seguridad moderna, Cosmikal garantiza un entorno seguro y controlado para usuarios y activos, ofreciendo soluciones que aúnan tecnología avanzada, visibilidad total y cumplimiento normativo, permitiendo que los CISOs y responsables de IT trabajen con confianza y seguridad máxima.




